El momento de comprar una
vivienda es una decisión sumamente importante por temas de inversión, tiempo,
gustos, etc. Sin embargo, el vender una vivienda no se aleja de las situaciones
caóticas, existen muchas dificultades, que personas naturales, pasan a la hora
de vender su vivienda. No siempre es cuestión de colocar un letrero, en muchos
casos se deben pagar algunas cosas como: hipotecas, si hubiera alguna; alguna plusvalía
de haciendo y además, las modificaciones para poder darle un aspecto hogareño y
llamativo. Estas son algunas cosas que toman tiempo hacer y son un tanto
complicadas, más aun si no se cuenta con un profesional inmobiliarios. Además,
si se contase con un especialista inmobiliario siempre se debe tener
conocimiento de los errores más comunes que pasan las personas a la hora de
vender una vivienda.
MULTIPLES NEGOCIACIONES
Las múltiples relaciones que se
tiene a la hora de hacer una venta es un problema, no solo se debe relacionar
con el comprador, sino también con abogados, bancos, notarios y muchas más
personas involucradas. Estas interacciones son muchas y toman tiempo, sobre
todo a la hora de pedir más visitas, que en su mayoría, son días distintos y
horarios que se acoplen al del comprador. Para ello se debe tener una buena organización
y saber bien que días y horarios se puede atender al grupo de personas. Por
otro lado, los problemas con abogados, bancos, etc. Se pueden manejar de una
manera más sencilla contratando a un especialista y teniendo pendiente todo el
tiempo los movimientos que se deban realizar.
ACOMODAR EL INMUEBLE
Para tener un ambiente más
agradable para las personas interesadas en la vivienda se debe tener en cuenta
el aspecto de la casa. Siempre es bueno mantener el ambiente ordenado, nadie
quiere visitar una casa y encontrar los cuartos desordenados o cerrados por algún
motivo. En su mayoría, son aspectos que no se toman con importancia pero que
sirven de mucho para la primera impresión del interesado, la limpieza es
fundamental.
EL TIEMPO
El tiempo debe estar bien
establecido, pues es importante darles prioridad a los interesados en la
vivienda. Es bueno tener un horario fijo de visitas para no tener muchos
problemas de organización. Algunas veces cuando se quiere vender la casa pero
los propietarios siguen habitándola suelen tener problemas de organización, ya
que si se encuentran integrantes de la familia suelen ocupar algún cuarto que
no permite inspeccionar bien el ambiente.
PRECIO
Este en ocasiones suele ser un
problema, pues no se sabe que tan alto es el precio o que tan bajo, si no se
cuenta con un especialista en el asunto, esto podría tomar más tiempo de lo
establecido. Siempre es bueno comenzar con un precio que vaya de acuerdo al
mercado y calidad del hogar, con esto poner un precio alto a veces puede
funcionar para negociar y poder enganchar al cliente bajando un poco el precio
principal.
VENTA FINAL
Es en este punto donde entran los
notarios, abogados, condiciones de la casa entre otros inconvenientes que se
puedan presentar. Asimismo se debe tener claro los precios, impuestos, costes de notaria y otros. Cuando se tiene
fijo todo el proceso y bien establecido esto se hace más sencillo y rápido. Por
ello es importante siempre contar con la supervisión de un especialista. Ellos
manejan desde siempre estas situaciones y saben cómo mantener siempre con
posibles compradores.
En conclusión, los agentes inmobiliarios
pueden ser personas que aceleren y faciliten todo el proceso, normalmente las
personas piensan que vender una casa es cosa de unos días, un cartel y
contactos, es mucho más que eso. Se debe estar pendiente siempre de cada
detalle y cada situación que se pueda solucionar de manera rápida, contar con
un plan de acción bien establecido. Es lo que los profesionales logran hacer
con la compra venta. Asimismo, la casa, como se dijo en un principio, debe
reflejar un ambiente cálido y sin imperfecciones que puedan arruinar el proceso
de venta. Por otro lado, si se decide contratar un agente inmobiliarios también
toma tiempo e inversión, pero es la decisión más acertada que se pueda tener.